Dominios de Berceo es la expresión más auténtica del mejor vino de Rioja. Esto es así porque son los vinos elaborados a partir de las mejores uvas que hay en toda la denominación, procedentes de los viñedos más característicos de Rioja: cepas prefiloxéricas robustas como un árbol, otras plantadas en 1936 o el graciano puro más antiguo de España, enraizadas en los mejores terrenos de Baños de Ebro y de El Ciego. Si el mejor vino de Rioja se pudiese delimitar, estaría dentro de los dominios de Berceo.